El ciprés lo podemos encontrar casi en cualquier cementerio que vayamos, es algo muy común y un símbolo muy antiguo.



Se dice que dada su altura y estructura conecta la tierra con los cielos, de ahí su estrecha relación con los cementerios. Además de esta creencia lo cierto es que los cipreses son mucho más, llegan a vivir más de 500 años y los hay que superan el milenio.



Además de en los cementerios, podemos encontrar cipreses formando filas en los campos de cultivo de las ciudades costeras. Su función es la de bloquear el viento salinizado que proviene del mar y que no afecte al cultivo, como una barrera protectora, y lo cierto es que hacen bien su función.

Fijaros la próxima vez que paseis por los campos de ciudades como Valencia, seguramente veais lo que os digo.